Codex Alimentarius vs salud


Antes de explicar con detalle lo que es el Codex, te aviso que es algo que nos afecta a todos de manera directa. Si hoy en día vas al supermercado, te encontrarás con langostinos de Argentina, café de colombia, carne de Portugal, frutas de Perú, pescado de Somalia, vino de España o comida de cualquier parte del mundo. Pues bien, esta organización es el organismo que controla cómo, cuándo, en qué condiciones circulan todos los alimentos por el mundo y qué productos químicos se le pueden añadir y cuales no. Tambien dicta que alimentos son buenos y cuales no, por lo tanto, para protegernos va a declarar una serie de plantas y sus productos ILEGALES. Es decir, lo que compres en el supermercado lleva los productos químicos que lleva, porque lo ordena esta organización. Y punto.

La Comisión del Codex Alimentarius fue creada en 1963 por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) con el fin de desarrollar normas alimentarias, reglamentos y otros textos relacionados tales como códigos de prácticas bajo el Programa Conjunto FAO/OMS de Normas Alimentarias. Su sede está en Roma y las materias principales de este Programa son la protección de la salud de los consumidores, asegurar unas prácticas de comercio claras y promocionar la coordinación de todas las normas alimentarias acordadas por las organizaciones gubernamentales y no gubernamentales. Su dinero lo recibe en un 75% de la FAO y en un 25% de la OMS.

Es decir, el CODEX ALIMENTARIUS (reglas de los alimentos) es «una manera de hacer las cosas» y la FAO nos dice -a nosotros, a las empresas y a los gobiernos- que cosas se deben hacer, cuales no se deben hacer y sobretodo, cómo hacerlas. La FAO y la OMS ordenan y el Códex es el brazo ejecutor.

Suena bonito, ¿Verdad? Pues no lo es, hoy analizaré algunos aspectos de este código de «buena conducta y práctica», ya que a poco que investigues te llevarás desagradables sorpresas. Partamos de la base de que el CODEX ya no es un código ético, si no que con el paso de los años se ha convertido macroagencia multinacional que impone las condiciones de cultivo y de venta en la totalidad de los países más importantes del mundo adheridos a la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Mi parte escéptica hizo que lo primero que hiciera fuera visitar la página oficial del Codex Alimentarius para ver por mi mismo que no era una exageración de algún exacerbado. Pero mi sorpresa fué mayúscula al echar un vistazo a su página y ojear la lista de normas oficiales, entre las que me llamó la atención la referente a los alimentos modificados genéticamente -transgénicos- (CAC/GL nº 45 del año 2003 y revisada en el año 2008), sobre todo el punto 3:

DIRECTRICES PARA LA REALIZACIÓN DE LA EVALUACIÓN DE LA INOCUIDAD DE LOS ALIMENTOS OBTENIDOS DE PLANTAS DE ADN RECOMBINANTE

3. Los principios del Codex en materia de análisis de riesgos, y en particular los referentes a la evaluación de riesgos, están destinados a aplicarse sobre todo a entidades químicas definidas, como aditivos alimentarios y residuos de plaguicidas, o a sustancias químicas o contaminantes microbianos específicos que comportan peligros y riesgos identificables, pero no a alimentos enteros como tales. En efecto, son pocos los productos alimenticios que se han evaluado científicamente de una manera que permita caracterizar en forma cabal todos los riesgos que a ellos se asocian. Además, muchos alimentos contienen sustancias que probablemente se considerarían peligrosas si se utilizaran métodos convencionales para evaluar su inocuidad. Por estos motivos, para examinar la inocuidad de alimentos enteros se necesita un enfoque más específico.

Simplemente alucinante. Voy a repetir sus palabras, porque hay que leerlo dos veces: «Además, muchos alimentos contienen sustancias que probablemente se considerarían peligrosas si se utilizaran métodos convencionales para evaluar su inocuidad«. No sé si se refieren a los alimentos transgénicos (OMG) o a los alimentos naturales, de cualquiera de las dos formas, me parece increíble esta afirmación en una organización internacional dedicada a la alimentación. Pongo el enlace del archivo original en PDF.

La lectura de esta simple norma elegida al azar (bueno, en realidad el nombre me llamó la atención) me hizo empezar a pensar que todas las voces que hay protestando por la existencia del Codex Alimentarius tenían algo de razón. Así que seguí husmeando por su página web. Si visitas la sección de pesticidas o la de medicamentos, comprobarás que en vez de un organismo regulador de los alimentos, más bien parece un catálogo de una industria química o de un laboratorio farmacéutico.

Por ejemplo en las normas oficiales -salvo la sección de publicaciones- el 90% del apartado está dedicado a pesticidas permitidos, residuos de medicamentos y aditivos administrados. Pero atención a las cifras: 50 medicamentos permitidos que se pueden administrar a 16 especies animales, los más de 230 pesticidas que se pueden aplicar a los cultivos, o los más de 300 aditivos alimentarios, con un detalle asombroso de todos sus nombres, todo muy claro para que ninguna de las empresas que los fabrican no tengan nunca ningún problema, ya que están permitidos por el Codex Alimentarius.

Por cierto, entre los aditivos alimentarios, he encontrado el Aspartamo, donde lo recomiendan para su uso en frutas, hortalizas, pescado, moluscos, pan, quesos, cacao, chocolate, leche, salsas, chicles, turrón, sopas, caldos y hasta vinagre. Por cierto, en los chicles (goma de mascar), permiten una cantidad de hasta 10 gramos por kilo, una auténtica barbaridad, teniendo en cuenta que lo máximo recomendable por la propia OMS es de 40 mg por kilo de masa corporal.

Para no seguir mareándome con semejante engendro, dejaré que sea la doctora Rima Laibow (Médica bioquímica por la Universidad de Albert Einstein) la que siga hablando:

“[…]Déjenme aclarar que absolutamente nada de lo que estoy diciendo es exagerado, esta distorsionado o procede de la imaginación. Todo esto está documentado.El que controla los alimentos, controla el mundo. La OMS dijo en 1962, que estaba trabajando en la implementación mundial del “Codex Alimentarius” para el 31 de diciembre de 2009. Aquí va una explicación de esto: El comité del “Código Alimentario” está administrado por la “Organización Mundial de la Salud” (OMS) y la “Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ellos financian el “Codex” y lo ejecutan por petición de la ONU. Es decir, estos son el padre y la madre del “Codex Alimentarius”. En 1994 el “Codex” (desconocido prácticamente en España), declaró que los alimentos eran tóxicos, eran veneno. Por lo tanto, cada vaca en el planeta debía ser revisada y tratada genéticamente con una hormona recombinante de crecimiento propiedad de la compañía “MONSANTO”. Lo que es más: de acuerdo con el “Codex” cada animal usado como alimento en el planeta debe ser tratado con antibióticos subclínicos y con hormonas exógenas de crecimiento.

Si observas las estadísticas, según la O.M.S. y la F.A.O. estimadas en la predicción epidemiológica, ellos predicen, no nosotros, que solo la carencia de vitaminas y minerales, cuando se establezca la implementación global el 31 de diciembre de 2009, resultara en mínimo de 3 billones -con B- de muertos.

Este era el extracto de la miniconferencia realizada por la valiente doctora Rima Laibow. Debajo tienes el vídeo completo (VO con subtítulos en español):

Repito el consejo de siempre. Mira las etiquetas de lo que te vas a comer, no confíes en que «si está en la tienda, es que es bueno«, porque en muchos casos no es así. De lo que comas es lo que serás.

ENLACES:

Página oficial de Rima Laibow

Informe CONICET

Artículo en la página Movimiento Zeilgeist

Logros del Codex Alimentarius (escrito por el Codex Alimentarius)

Opinión de la web Verde alegría sobre el Codex Alimentarius